VII MARCHA NOCTURNA “LUNA ESTEPARIA” - Torrecilla de Valmadrid

Por séptimo año consecutivo acudimos a Torrecilla de Valmadrid (Zaragoza) para recorrer la estepa bajo la Luna llena. Cincuenta personas acudimos a la cita que este año ha introducido una ligera variante que la hace mucho más asequible a todo tipo de público. Nos juntamos jóvenes de 10 a 60 años con mucha ilusión y ganas de descrubir los secretos de este medio tan desconocido para muchos zaragozanos.

Manolo Lou nos recibió y nos presentó los secretos del Parque de La Balsa de Torrecilla. Pudimos ver la Alarba, la joya de la estepa, una planta que nos remonta a un pasado muy lejano unido a las estepas de Asia. La Ephedra con sus frutos. Agazapadas entre la vegetación encontramos las siluetas del Alcaravan o las Alondras. 

Nos ha preparado una  "camisa" o muda de la piel de una Culebra bastarda y un ejemplar de más de un metro atropellado en la carretera. La balsa está vacía, ya que las lluvias no han conseguido suficiente escorrentía para llegar hasta ella. El cielo se pone bastante oscuro y los primeros relámpagos cruzan el horizonte hacia Valmadrid. Al poco se levanta aire de tormenta y decidimos acercarnos al Ayuntamiento por si acaso.

Manolo aprovecha y saca cabezudos del aljibe. De todos los tamaños y fases atraen la atención de niños y mayores.

Leemos el MANIFIESTO VII MARCHA NOCTURNA “LUNA ESTEPARIA” , como es tradición, contando las novedades sobre la situación de la Estepa y el futuro Parque. Comienza a llover y nos refugiamos en el local municipal.

Manolo improvisa y nos enseña el cielo de primaver que hubiésemos visto hoy de estar despejado. Un programa de ordenador espectacular nos facilita la comprensión y las historias que nos cuenta Manolo sobre las estrellas encandilan al público.

Antes de que se vaya la luz decidimos subir hasta el alto del cementerio y poder contemplar el paisaje. José Antonio Dominguez nos explica los secretos y estrategias de las plantas y la conformación de estos relieves formado por vales de fondo plano, cabezos redondeados y más a lo lejos las muelas calizas.

La Luna hace acto de presencia en el horizonte. De color anaranjado empieza a sobresalir poco a poco, lo que la hace espectacular.

Dadas las circunstancias meteorológicas adversas decidimos comernos el bocata en el pueblo y tras dar buen paso a dos sandías exquisitas que llevábamos de postre, aprovechamos la noche húmeda para buscar anfibios.

Sapos parteros, incluso un macho con la puesta de huevos a la espalda,  y de espuelas correteaban por los alrededores, lo que contribuyó a redondear una noche perfecta.

Gracias de nuevo a todos los que han colaborado en esta nueva edición de la Marcha nocturna, y en especial a Manolo y José Antonio y a los vecinos de Torrecilla que cada año nos acogen.

MANIFIESTO VII MARCHA NOCTURNA “LUNA ESTEPARIA” completo pinchar aquí.